…Y, ya no hagas caso
a los gemidos que mis alas te
susurran…
- El silencio ha estallado en los
océanos
y el sordo grito de mi alma no se
escucha.-
Vete de aquí!
Déjame!
Vete de mí! Sálvate!
- Las cicatrices de mis pieles no se
cauterizan
con las sales coaguladas de las lagrimas…-
Extirpa mi imagen del espejo.
– como un apéndice –
Vomita
en mi copa, el mal trago…
Quise decir, que el Cielo no
era arriba,
y solo descubrí mi osamenta
– y debajo, los avernos –
Ah!
Piedra donde mueren Ah! Entropía mi Ser!
todos
los nacimientos!
- La
carne solo es un grano
entre
la arena de los lamentos-
… Y, ya no hagas caso
al borde –desafilado- de mi
lengua;
Vete de aquí! Déjame!
Vete de mí! Sálvate!
Quise decir, que el Cielo no
era arriba,
y solo descubrí mi osamenta
– y debajo, los avernos –
Soy El pirómano,
El incendiario.
El iniciador del
infierno,
- Mis venas se alimentan de las cenizas de
todas las hogueras…-
De mis manos
Se escupe el azufre. Y de mi
esperma
Nace el fuego…
Quise decir, que el Cielo no era arriba,
ResponderEliminary solo descubrí mi osamenta – y debajo, los avernos –
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- Mis venas se alimentan de las cenizas de todas las hogueras…-!!que ha cambiado en su poesía...bien a mi humilde juicio de torta fritera...usted hoy es lo que escribe en el momento que lo está haciendo por lo menos,!y eso para mí es lo máximo,no hacer !SER!bue es lo q yo observo!...y me detona ...todo,va !!grande valva!!
quien puede salvarse de tus letras?? Por donde estas? Te extraño tanto!!!
ResponderEliminarPirómano, incendiario de inquietudes, eres el hijo de la tierra que alberga las piedras calientes de nuestros ancestros, no puedes evitar ese destino, aunque tu te quemes en el infierno, danos tu calor para redimir tu destino y nosotros poder clausurar el nuestro de alguna manera...Así, me dejo, quemar en tu hoguera...bárbaro ché...
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