Amapolas. Mis jardines son, un
sinfín de Amapolas.
¡Dame, Césare, la gracia de la
sangre tibia!
¡Dame, Cesare, la gracia, de la inocencia del sinsentido!
Sonámbulo del suelo de todos los Cielos.
Durmiente del Cielo de todos mis sueños.
Cesare. Cesare. Cesare.
Mi jardín es un paraíso oceanizado de Amapolas.
Mi desquicio, es el desierto
donde el agua las semilla.
Y
yo, aquí, Cesare! - ¡Y yo, aquí! -
¿Cuántas muertes debemos matar, para vivir la brújula de los
insomniados?
¿Cuánto insomnio debemos vivir, para
morir la noche de los anestesiados?
Amapolas libres de mis neuronas.
(Leche tibia de la memoria.)
¡La Sangre aquí, Cesare!
- ¡Aquí la sangre! –
¡Adorméceme! - Pero no quieres
hacerlo –
¡Adorméscote! - Pero no quieres que lo haga –
Pero el jardín… (Amapolas)…
Pero el dolor… (Amapolas)
Pero, no queremos.
-Pero, el sueño.- - Pero, la sangre.-
Pero los “peros” de “peros”…. (
Y el más “pero”, Es Tán Lindo…)
A M A P O L A S
¡Mátame, mi Cesare inconformado!
¡Mátame dentro del sueño donde mis huellas te han abortado!
Yo caminaré, sonámbulo, hacia mi
propio Sepulcro,
- a fuerza de
sueño -
I
n s e
r t a
d o
En mi jardín de Amapolas.En los bordes de Nuestros Mundos…
Despelote es poco.
ResponderEliminarpoeta,usted es un disparate!un volcán en eterna erupción
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