¡Bacuos!
¿Creíais en verdad, que dejaría mis venas abiertas para saciar su vampirismo?
¡Imbéciles!
El legado de la palabra llega más allá de sus cinismos.
¡Ignorios!
Mi sangre corre en torrentes, por entre los ojos vacíos de sus miradas.
¡Mirad el Sol! - Allí aúlla el fuego que deshelasteis-
¡Mirad la Luna! - Allí murmuran los cantos que callasteis!
La Noche de la infamia se cuece de a ratos, en el horno de mis lamentos, Imbeciles.
¿En verdad, pensabais, que el veneno de sus desprecios, pesaban más que el aire?
¿En verdad, pretendíais, que el fusil de mi vuelo, se disparara contra los mártires?
¡Bacuos!
- Dos dedos en arma dispararan las babas, que mis palabras chillan, sobre sus Almas.
¡Ah!
¡Cóndores que sobrevuelan las huellas de los pies sangrantes de los poetas!
¡Ah!
¡Rapiñeros circunvalantes de la sangre vertida en cada letra!
¿Creíais en verdad, que dejaría mis venas abiertas para saciar su vampirismo?
¡Pues, No!
-Nuestra risa, Reirá. Y nuestras Almas, Almarán.
¡Hey, Uds!
Imbéciles vampiros de palabras.
Satánicas serpientes sin manzanas.
¡Mirad el Sol! -Desde allí nacimos- Bucólicos.
Mirad la Luna! - Desde allí morimos- Insurrectos.
¡Hey, Uds! ¡Ignorios!
- Dos dedos en arma dispararán las babas,
que mis palabras chillan,
sobre sus vientos.
Almarán. Amén.
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